<p align="left">Instituto Superior de Ciencias Médicas "Dr. Serafín Ruiz de Zárate Ruiz", Villa Clara.</p> <h2 align="left">Riesgo de caries en los niños de tercer grado de la escuela “Fernando Cuesta Piloto” </h2> <p><a href="#cargo">Dra. Lilian Toledo Reyes, <span class="superscript">1 </span>Dra. Lilian Rodríguez Pérez <span class="superscript">2</span> y Dra. Isabel Ramos Hurtado <span class="superscript">3</span></a><a name="autor" id="autor"></a></p> <h4>Resumen </h4> <p>Se realizó un estudio epidemiológico descriptivo transversal para determinar el riesgo de caries mediante el empleo de un modelo de predicción (tabla de riesgo) en 64 infantes que cursan el tercer grado en la escuela “Fernando Cuesta Piloto” en Santa Clara, en el período comprendido de septiembre a mayo del 2006. Para la estimación del riesgo de caries en niños se utilizó un modelo que emplea predictores factibles de medir en nuestros servicios estomatológicos, garantizando la identificación de factores de riesgo asociados con la enfermedad. La recogida de la información se llevó a cabo por el método de encuesta, mediante examen clínico, observación, mediciones y entrevistas individuales. Se pudo observar que el 19,4 % de los examinados se encontró en la categoría de alto riesgo. Se destaca que el factor de riesgo que más se asoció con otros de manera significativa o muy significativa fue el de hábitos nocivos, seguido por antecedentes de caries y caries en familiares. Consideramos que el empleo de este modelo de predicción resulta de vital importancia para garantizar la identificación de factores asociados con la enfermedad y favorecer la proyección estratégica en función de prevenir el inicio de esta.</p> <p><strong><em>Palabras clave</em>:</strong> caries dental, factor de riesgo, modelo de predicción.</p> <p> </p> <br clear="all" /> <p>Varias han sido las teorías que han tratado de explicar el origen de la caries dental desde la químico parasitaria de Millerz. <span class="superscript">1-4</span> Sin embargo, actualmente existe el concenso de que la enfermedad es multifactorial y se reconoce la interacción de 3 factores principales: el huésped (particularmente la saliva y los dientes), la microflora y el sustrato. Además de estos factores, deberá tenerse en cuenta el tiempo, consideración fundamental en todo estudio sobre la causa que origina la aparición de la caries.<br /> <br /> Teniendo en cuenta el complicado origen de esta enfermedad y su alta prevalencia, sería una meta básica de la odontología prevenir su inicio y desarrollo posterior. Una manera ideal para cumplir con esta meta sería concentrar la mayoría de los recursos disponibles sobre aquellos individuos o grupos de ellos que están más propensos a desarrollarla, es decir, en riesgo, para lo cual se necesita identificar los factores de riesgos que los afectan.<span class="superscript">5,6</span><br /> <br /> El factor de exposición es algún fenómeno de naturaleza física, química, orgánica, psicológica o social, en el genotipo, en el fenotipo, o alguna enfermedad anterior al efecto que se está estudiando, y que por la variabilidad de su presencia o de su ausencia, está relacionada con la enfermedad investigada, o puede ser la causa de su aparición. <span class="superscript">7-9</span>.Estos factores se conocen como <em>predictores.</em> De manera general se ha observado que individualmente, tienen muy poco efecto, lo cual varía al agrupar algunos de ellos, aumentando así su poder predictivo. <span class="superscript">10,11</span><br /> <br /> El trabajo con grupos de alto riesgo presupone lograr la planificación de estrategias orientadas a abortar la aparición de la enfermedad sin dilapidar recursos, lo que permite además dotar a la población de elementos que le permitan crear responsabilidad respecto a su salud, desechar estilos de vida insanos y elevar la calidad de esta.<br /> <br /> Todo lo anterior motivó la realización de este trabajo, con el objetivo de determinar el riesgo de caries en niños, utilizando un modelo con predictores factibles de medir en nuestros servicios estomatológicos, y garantiza la identificación de factores de riesgo asociados con la enfermedad, con la visión de fomentar su empleo, pues se considera que las edades infanto-juveniles son muy apropiadas para llevar a cabo este tipo de labor que garantizará que nuestros niños transiten en la vida lo más sanos posible y que alcancen los conocimientos necesarios para el autocuidado y la responsabilidad ante la salud.</p> <h4 align="left">Método</h4> <p>Se realizó un estudio epidemiológico descriptivo transversal para determinar el riesgo de caries mediante el empleo de un modelo de predicción (tabla de riesgo) en 64 infantes que cursan el tercer grado en la escuela “Fernando Cuesta Piloto”, en Santa Clara, en el período comprendido de septiembre a mayo de 2006.<br /> <br /> La recogida de la información se realizó por el método de encuesta, mediante el examen clínico, observación, mediciones y entrevistas individuales.<br /> El examen se realizó utilizando espejo bucal plano y explorador. Se emplearon, además, para la determinación de flujo salival, probetas, pipetas, <em>beaker</em> y cronómetro. El puntaje final para la tabla de riesgo de cada niño se determinó luego de identificados los factores de riesgo relacionados en esta, cuyo resultado se informó en la historia cínica individual.</p> <p><em>Determinación del grado de riesgo</em>:<br /> <br /> Para cada criterio (factor de riego asociado con la caries dental) que está presente en el modelo de predicción (tabla de riesgo), se asignó una puntuación positiva, y por cada uno que no está presente una puntuación negativa; al final se realizó la suma algebraica y cuando la diferencia fue mayor que 0, se clasificó al paciente como alto riesgo, si fue menor que 0, se clasificó como bajo riesgo.</p> <table border="1" align="center" cellpadding="0" cellspacing="0"> <tr> <td width="453" valign="top"> <p align="center">Factores de riesgo</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">Puntuación otorgada</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Cepillado dental </p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">3</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Placa dentobacteriana</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">3</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Flujo salival</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">3</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Ingestión de azúcar o carbohidratos refinados </p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">3</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Aparatos de prótesis u ortodoncia: no utiliza</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">1</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Enfermedad gingival o periodontal</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">2</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Opacidades del esmalte o hipoplasias </p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">1</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Fluorosis dental</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">1</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Caries presentes o activas</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">2</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Índice de CPO-D mayor al de su población </p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">2</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Caries en padres, hermanos u otros familiares que conviva</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">1</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Obturaciones defectuosas</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">1</p></td> </tr> <tr> <td width="453" valign="top"> <p>Hábitos nocivos: tete, biberón, respirador bucal, bruxismo, queilofagia</p></td> <td width="318" valign="top"> <p align="center">1</p></td> </tr> </table> <p>Además se examinaron y entrevistaron a los padres para determinar la presencia de caries en ellos e indagar sobre la presencia de estas en otros familiares que convivían con los niños, así como para sustentar criterios relacionados con los hábitos de los infantes.<br /> <br /> La estimación de flujo salival se realizó por estimulación mecánica, para lo cual se entrenaron los niños previamente, luego se mandaba a tragar, se introducía polietileno en la boca y se mantenían masticando durante 3 minutos. Después de medido el tiempo con el cronómetro, pasaban a escupir en los <em>beakers</em>, preparados con ayuda de las pipetas con 2 mL de agua, lo cual facilita la separación de la saliva del recipiente; se pasaba a vaciar en las probetas y a estimar la medición de la columna restando los 2 mL añadidos. En esta determinación se tomó el criterio de secreción normal en 24 horas de 1 300 mL de acuerdo con el juicio de expertos, y a partir de esto, se obtuvo el dato en 3 min (2,5 mL). <br /> <br /> El tratamiento de los datos se realizó mediante el empleo de un <em>software</em> de procesamiento estadístico (SPSS), versión 8.0 para Windows; luego de confeccionar la base de datos en el mismo se obtuvieron los resultados y se resumieron en tablas y gráficos estadísticos. Se determinaron frecuencias absolutas (número de casos) y relativas (porcentajes) en las distribuciones de frecuencia conformadas.<br /> <br /> Para el análisis e interpretación de los resultados se utilizó el análisis porcentual, índice de COP-D y de ceo, índice de fluorosis dental de Dean, índice de placa de Löe y Silness y se aplicaron pruebas estadísticas inferenciales: <em>test</em> de Chi Cuadrado y se utilizó la Tau-b de Kendal para determinar grado y sentido de la correlación bivariada entre dichos factores.</p> <h4>Resultados</h4> <p>Nuestra población expone un predominio de féminas del 58,1 % sobre el 41,9 % de los representantes del sexo masculino.<br /> <br /> El factor de riesgo de mayor influencia en nuestro estudio fue la presencia de hábitos de acuerdo con la clasificación de la OMS, y dentro de estos, los hábitos nocivos en el 72,6 % de los infantes, seguido en este grupo por la dieta deficiente que mantenía el 46,8 % de los niños. En la categoría de factores biológicos, los más representativos para nuestro estudio resultaron la experiencia anterior de caries y la placa dentobacteriana (51,6 % y 41,9 %, respectivamente).<br /> <br /> En la tabla 1 se muestran las correlaciones bivariadas entre los factores de riesgo utilizando el estadígrafo Tau-b de Kendal. Es de destacar que entre los factores de riesgo que más se asociaron con otros de manera significativa o muy significativa, se observaron los hábitos nocivos, con otros 6 factores, y le siguieron los antecedentes de caries y caries en familiares.</p> <p align="center">Tabla 1. Correlación bivariada entre los factores de riesgo identificados. Escuela “Fernando Cuesta Piloto”, Santa Clara, 2006</p> <table border="1" cellspacing="0" cellpadding="0" align="center"> <tr> <td width="13%" valign="top"> <p> </p></td> <td width="8%"> <p align="center">Cepillado</p></td> <td width="7%"> <p align="center">Placa dentobacteriana</p></td> <td width="7%"> <p align="center">Flujo salival</p></td> <td width="7%"> <p align="center">Alimentación azucarada</p></td> <td width="7%"> <p align="center">Aparato ortodoncia</p></td> <td width="7%"> <p align="center">Enfermedad gingival</p></td> <td width="7%"> <p align="center">Hipoplasia</p></td> <td width="7%"> <p align="center">Antecedentes de caries</p></td> <td width="7%"> <p align="center">Hábitos nocivos</p></td> <td width="7%"> <p align="center">Caries en familiares</p></td> <td width="9%"> <p align="center">Obturaciones defectuosas</p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Cepillado</p></td> <td width="8%"> <p align="center">1</p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Placa dentobacteriana</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0,21</p></td> <td width="7%"> <p align="center">1</p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Flujo salival</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0,82</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,91</p></td> <td width="7%"> <p align="center">1</p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Alimentación azucarada</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0,31</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,04*</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,96</p></td> <td width="7%"> <p align="center">1</p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Aparato ortodoncia</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0,98</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,72</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,98</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,88</p></td> <td width="7%"> <p align="center">1</p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Enfermedad gingival</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0.,31</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,61</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,96</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,23</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0.,91</p></td> <td width="7%"> <p align="center">1</p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Hipoplasia</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0,55</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,67</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,98</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,26</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,32</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,44</p></td> <td width="7%"> <p align="center">1</p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Antecedentes de caries</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0,04*</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,00**</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,85</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,01**</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,76</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,33</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,42</p></td> <td width="7%"> <p align="center">1</p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Hábitos nocivos</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0.,08</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,02*</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,21</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,01**</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,07</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,04*</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,04*</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,00**</p></td> <td width="7%"> <p align="center">1</p></td> <td width="7%"> <p align="center"> </p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Caries en familiares</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0,03*</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,00**</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,72</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,00**</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,83</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,42</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,51</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,00**</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,00**</p></td> <td width="7%"> <p align="center">1</p></td> <td width="9%"> <p align="center"> </p></td> </tr> <tr> <td width="13%"> <p>Obturaciones defectuosas</p></td> <td width="8%"> <p align="center">0,95</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,82</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,96</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,23</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,96</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,87</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,81</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,24</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,37</p></td> <td width="7%"> <p align="center">0,77</p></td> <td width="9%"> <p align="center">1</p></td> </tr> </table> <p align="center">Fuente: historia clínica individual.<br /> * La correlación es significativa al nivel de 0,05 (bilateral).<br /> ** La correlación es muy significativa al nivel de 0,01 (bilateral).</p> <p><br /> Según se muestra en la tabla 2, no se encuentra relación significativa (p = 0,32863) entre el riesgo identificado y el sexo, lo que manifiesta la independencia de estas variables en nuestro estudio (<em>x</em><span class="superscript">2</span>=3,43997; gl=3). Se puede observar que el 19,4 % de los examinados se encontró en la categoría de alto riesgo.</p> <p align="center">Tabla 2. Clasificación de la población según grado de riesgo y sexo. Escuela “Fernando Cuesta Piloto”, Santa Clara, 2006</p> <table width="658" border="1" align="center" cellpadding="0" cellspacing="0"> <tr> <td width="127" rowspan="2" valign="top"> <p> </p> <p align="center">Grado de riesgo</p></td> <td width="177" colspan="2"> <p align="center">Masculino</p></td> <td width="177" colspan="2"> <p align="center">Femenino</p></td> <td width="177" colspan="2"> <p align="center">Total</p></td> </tr> <tr> <td width="88"> <p align="center">No.</p></td> <td width="88"> <p align="center">%</p></td> <td width="88"> <p align="center">No.</p></td> <td width="88"> <p align="center">%</p></td> <td width="88"> <p align="center">No.</p></td> <td width="89"> <p align="center">%</p></td> </tr> <tr> <td width="127"> <p>Alto riesgo</p></td> <td width="88"> <p align="center">4</p></td> <td width="88"> <p align="center">6.5</p></td> <td width="88"> <p align="center">8</p></td> <td width="88"> <p align="center">12.9</p></td> <td width="88"> <p align="center">12</p></td> <td width="89"> <p align="center">19.4</p></td> </tr> <tr> <td width="127"> <p>Bajo riesgo</p></td> <td width="88"> <p align="center">22</p></td> <td width="88"> <p align="center">35.5</p></td> <td width="88"> <p align="center">28</p></td> <td width="88"> <p align="center">45.2</p></td> <td width="88"> <p align="center">50</p></td> <td width="89"> <p align="center">80.6</p></td> </tr> <tr> <td width="127"> <p>Total</p></td> <td width="88"> <p align="center">26</p></td> <td width="88"> <p align="center">41.9</p></td> <td width="88"> <p align="center">36</p></td> <td width="88"> <p align="center">58.1</p></td> <td width="88"> <p align="center">62</p></td> <td width="89"> <p align="center">100</p></td> </tr> <tr> <td width="658" colspan="7" valign="top"> <p align="center"> p>0,05</p></td> </tr> </table> <p align="center">Fuente: historia clínica individual.</p> <h4>Discusión</h4> <p>Han sido numerosos los estudios epidemiológicos realizados en el mundo sobre los factores de riesgo y el estado de salud bucodental, pero con resultados diferentes, debido a la metodología empleada, la diferencia de los programas preventivos, el nivel de desarrollo económico y sociocultural del país o lugar donde se realiza. Esta realidad sociosanitaria dificulta la discusión de cualquier trabajo sobre el tema, pues los estudios epidemiológicos son una fotografía del lugar en un momento dado, y le imprime un sello particular a los resultados obtenidos. Los factores de riesgo están localizados en el individuo, la familia, comunidades y ambiente, pero cuando se interrelacionan aumentan sus efectos. <span class="superscript">12 </span><br /> <br /> Los factores de riesgo no actúan de forma aislada, sino en conjunto, donde se asocian 2 o más de ellos. Estas correlaciones resultan importantes, pues al eliminar, prever o limitar una, disminuye el riesgo de enfermar, al no potenciarse el efecto nocivo del riesgo.<br /> <br /> En la tabla 1 se observa que el factor de riego que con más frecuencia se asoció con otros fue hábitos nocivos (tete, biberón, respiración bucal, bruxismo, queilofagia). El uso de biberón en 5 infantes, sobre todo antes de la hora del sueño, es un hallazgo relevante, porque este es un período de reposo relativo de músculos y donde la ausencia de la higiene bucal contribuye a la acción aumentada de los carbohidratos. Este dato queda un poco alejado del estudio realizado por <em>Hallet</em> y <em>O’Rurket, </em>el cual muestra una prevalencia de 44,8 niños con esta práctica. <span class="superscript">11</span> Dicho hábito conlleva a la denominada caries del biberón o caries de la lactancia. El flujo de saliva se reduce mucho durante el sueño y los líquidos dulces permanecen alrededor de los dientes durante largos períodos de tiempo. Esto crea el entorno perfecto para que se desarrolle la caries dental. <span class="superscript">13</span> Le sigue a este parámetro el antecedente de caries y la presencia de caries en familiares. El primero, según coinciden muchos autores, ha demostrado ser el mejor predictor en la mayoría de los modelos probados para caries en dentición decidua y permanente. El segundo es considerado en una doble dimensión por nosotros, dentro del marco ambiental, de gran importancia si se observa que la caries dental es una entidad contagiosa, pero también teniendo en cuenta su consideración biológica. Piedróla <span class="superscript">14 </span>plantea que algunas familias tienen mayor o menor prevalencia de caries, lo que está determinado por el factor genético. Muchos grupos étnicos también son propensos a padecer esta afección. Sin embargo, aquí cabe el supuesto de las condiciones socioeconómicas y culturales en las que se desarrollan los individuos.<br /> <br /> La biología molecular ha experimentado enormes adelantos en la comprensión de la base genética de las enfermedades, pero esta relevancia puede ser restringida si se centra la atención en el estudio aislado de sus mecanismos, y al contrario, puede ser engrandecida con las interacciones de la susceptibilidad genética e influencia ambiental, pues el proceso salud-enfermedad es la consecuencia biopsicosocial de la influencia genética y ambiental de cada persona con susceptibilidad propia y específica.<span class="superscript">14</span><br /> <br /> En cuanto a la posible influencia del género, no se han encontrado diferencias sustanciales entre la proporción de hembras y varones, cuando se mide riesgo de caries en la bibliografía consultada en grupos etarios similares, <span class="superscript">15-17</span> lo cual coincide con nuestro estudio. En nuestra investigación se apreció que aunque el mayor porcentaje de los niños se agrupa en la categoría de bajo riesgo, un número considerable se considera alto riesgo, lo que nos hace pensar que aunque existen programas encaminados a la reducción de la enfermedad sobre todo en las primeras edades de la vida, siguen existiendo fallas a la hora de implementarlos.<br /> <br /> El conocimiento de los grupos de alto riesgo permite plantear acciones eficaces para la prevención, curación y rehabilitación del enfermo, así como formular y probar hipótesis de causalidad, para evaluar las medidas de salud y tomar decisiones administrativas en esos servicios. También permite garantizar el diseño de estrategias de intervención con acciones dirigidas a elevar la educación sanitaria del individuo, la familia y la comunidad, al dotarlos con el caudal de conocimientos necesarios para fomentar el autocuidado y la responsabilidad con respecto a su propia salud.<br /> <br /> Consideramos que el empleo de modelos de predicción resulta de vital importancia para garantizar no solo una proyección estratégica en nuestra labor, relacionada con la planificación y sustentabilidad financiera, sino también para el desarrollo de acciones encaminadas a fomentar la salud bucal dirigidas a aquellas personas que más lo necesitan y que conduce al incremento de la calidad de vida. <br /> <br /> La identificación de individuos propensos a desarrollar la enfermedad desde las edades tempranas de la vida, constituye un reto científico moral para el profesional de la atención primaria de la salud (APS), pues el estomatólogo debe ampliar sus conocimientos sobre la atención al medio y al hombre.</p> <h4>Summary</h4> <p><strong>Risk of dental caries in 3rd grade schoolchildren from “Fernando Cuesta Piloto” elementary school.</strong></p> <p>A cross-sectional descriptive epidemiological study was undertaken to determine the risk of dental caries in 64 third-grade children from “Fernando Cuesta Piloto” elementary school located in Santa Clara city, Villa Clara province, in the period from September 2005 to May 2006. For caries risk estimation, a model comprising feasible predictors that may be measured in our dental services was used, thus assuring the detection of disease-related risk factors. The surveying method based on clinical exam, observation, measurement and individual interviews made data collection possible. It was stressed that the most significant risk factor was harmful habits, followed by a history of dental caries in the children and their relatives. It was considered that the use of a predictive model is of vital importance to ensure detection of risk factors associated to the disease and to encourage strategic actions to prevent the onset of caries.</p> <p><em><strong>Key words: </strong></em>dental caries, risk factor, predictive model.</p> <h4>Referencias bibliográficas</h4> <p>1. Colectivo de autores. Guías prácticas clínicas de caries dental. En: Col. autores. Guías prácticas de Estomatología. La Habana: Ciencias Médicas; 2003. pp. 23-75.</p> <p>2. Duque de Estrada Riverón J, Rodríguez Calzadilla A. Factores de riesgo en la predicción de las principales enfermedades bucales en los niños. Rev Cubana Estomatol [serie en Internet]. 2001 [citado 13 mayo 2006]; 39(2):[aprox. 8p.]. Disponible en: <a href="http://www.bvs.sld.cu/revistas/est/vol38_2_01/est04201.htm">http://www.bvs.sld.cu/revistas/est/vol38_2_01/est04201.pdf </a></p> <p>3. Hallet KB. Early childhood caries, a new name for an old problem. Ann R Australian Coll Dent Surg 2000;15(1):268-75.</p> <p>4. Hallett KB, O’Rourke PK. Social and behavioural determinants of early childhood caries. Aust Dent J [serie en Internet]. 2003 [citado 13 May 2006];48(1):[aprox. 6p.]. Disponible en: <a href="http://www.ada.org.au/media/documents/Products_Publications/Journal%20Archives/2003%20Archive/March/0303Hall.pdf">http://www.ada.org.au/media/documents/Products_Publications/Journal%20Archives/2003%20Archive/March/0303Hall.pdf</a> </p> <p>5. Mattos Vela MA, Melgar Hermoza RA. Riesgo de caries dental. Rev Estomatol Herediana [serie en Internet]. 2004 En [citado 13 mayo 2006];14(1-2):[aprox. 5p.]. Disponible en: http://www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1019-43552004000100021&lng=en&nrm=iso>. ISSN 1019-4355.</p> <p>6. Zero D, Fontana M, Lennon AM. Clinical applications and outcomes of using indicators of risk in caries management. J Dent Educ 2001;65:1126-32.</p> <p>7. González MC, Gómez SS. Experiencia de caries en molares temporales, como predictor de la experiencia de caries en el primer molar. Rev Fac Odontol Univ Valparaíso 2002;2(6):460-6. </p> <p>8. Van Palenstein Helderman WH, Mulder J, Van`t Hof MA, Truin GJ. Validation of a Swiss method of caries prediction in Dutch children. Community Dent Oral Epidemiol 2001;29:341-5.</p> <p>Cuba. Ministerio de Salud Pública. Programa nacional de atención estomatológica integral a la población. La Habana: Editorial Ciencias Médicas; 2002. pp. 105-6.</p> <p>Smith RE, Badner VM, Morse DE, Freeman K. Maternal risk indicators for childhood caries in an inner city population. Comm Dent Oral Epidemiol 2002;30:176-81. </p> <p>Hallett KB, O’Rourke PK. Dental caries experience of preschoolchildren from the north Brisbane region. Aust Dent J 2002;47:331-8.</p> <p>9. Brearley Messer L. Assessing caries risk in children. Aust Dent J 2000;45(1):10-6.</p> <p>10. Johnson RK. The 2000 dietary guidelines for Americans: Foundation of US nutrition policy. Brit Nutr Found Bull 2000;25:241-8.</p> <p>11. Piedróla Gil G. Medicina preventiva y salud pública. 8 ed. Barcelona: Salvat; 1990. pp. 51-88.</p> <p>12. Ruottinen S, Karjalainen S, Pienihakkinen K, Lagstrom H, Niinikoski H, Salminen M, et al. Sucrose intake since infancy and dental health in 10-year-old children. Caries Res 2004;38(2):142-8. </p> <p>13. Jin BH, Ma DS, Moon HS, Paik DI, Hahn SH, Horowitz AM. Early childhood caries: prevalence and risk factors in Seoul, Korea. J Public Health Dent 2003;63(3):183-8. </p> <p>14. Almagro ND, Benítez HJA, García AMA, López LMT. Prevalencia de caries dental y factores asociados en escolares de la población de Loja (Granada). Rev Andaluza de Odontol Estomatol 2002;12(1):13-7.</p> <p> </p> <p>Recibido: 27 de marzo del 2007. Aprobado: 20 de abril del 2007.<br /> Dra. <em>Lilian Toledo Reyes</em>. Gran Bloque Apartamento 15 Circunvalación y Oquendo. Reparto Virginia, Santa Clara, Villa Clara. Teléf. 211916. e-mail: <a href="mailto:lilian_toledor@yahoo.es">lilian_toledor@yahoo.es</a> </p> <p><span class="superscript"><a href="#autor">1</a></span><a href="#autor"> Especialista de I Grado en E.G.I. Instructora. <br /> <span class="superscript">2</span> Especialista de I Grado en E.G.I. Profesora Asistente. <br /> <span class="superscript">3 </span> Especialista de II Grado en E.G.I. Profesora Titular. </a><a name="cargo" id="cargo"></a></p>