Factores de riesgo asociados con la maloclusiónMalocclusion-related risk factors
Abstract:

Se realiza un estudio analítico del tipo de casos y controles en el municipio de Colón, provincia de Matanzas, en el período comprendido del año 2000-2002. El universo de estudio estuvo constituido por 939 niños de 9, 12 y 15 años de edad, de los cuales se tomó una muestra aleatoria equivalente a 120 niños: 63 femeninos y 57 masculinos. Se caracterizaron los riesgos relacionados con hábitos bucales deformantes (40 %), hipotonía muscular (16,70 %), comportamiento de la herencia (32,50 %), malnutrición (20 %), caries dental (56,70 %) y dientes perdidos (25 %). Se calculó el Odds ratio relacionado con hábitos bucales (7,69), hipotonía muscular (12,43) y herencia (3,90), lo que significó la probabilidad de riesgo de enfermar en presencia de los factores de riesgo considerados, que permite establecer un sistema de vigilancia epidemiológica al respecto.

An analytical case-control study was performed in Colon municipality, Matanzas province, Cuba, from 2000 to 2002. The universe of study was made up of 939 children aged 9, 12 and 15 years, from whom 120 were taken as equivalent random sample (63 females and 57 males). The risk characterization was based on deforming oral habits (40%), muscular hypotonia (16,70%, heredity performance (32,5%), malnutrition (20%), dental caries (56,70%) and lost teeth (25%). The estimated odds ratio was more related to oral habits (7,69%) muscular hypotonia (12,43%) and heredity (3,90%), which means that there exists the probability of getting sick in the face of the considered risk factors. This allows setting up an epidemiological surveillance system on this issue.

Keywords:
    • maloclusión;
    • enfermedades periodontales;
    • caries dental;
    • factores de riesgo;
    • Malocclusin;
    • Periodontal diseases;
    • Dental caries;
    • Risk factors.
<p>Facultad de Estomatolog&iacute;a <br> </p> <p>Instituto Superior de Ciencias M&eacute;dicas de La Habana <br> </p><h2>Factores de riesgo asociados con la maloclusi&oacute;n <br> </h2> <p><a href="#cargo">Dra. Yohany Duque de Estrada River&oacute;n,<span class="superscript">1</span> Dr. Amado Rodr&iacute;guez Calzadilla,<span class="superscript">2</span> Dra. Gisele Coutin Marie<span class="superscript">3</span> y Dra. Noraysi Gonz&aacute;lez Garc&iacute;a<span class="superscript">1</span></a><a name="autor"></a> <br> </p><h4>Resumen <br> </h4> <p>Se realiza un estudio anal&iacute;tico del tipo de casos y controles en el municipio de Col&oacute;n, provincia de Matanzas, en el per&iacute;odo comprendido del a&ntilde;o 2000-2002. El universo de estudio estuvo constituido por 939 ni&ntilde;os de 9, 12 y 15 a&ntilde;os de edad, de los cuales se tom&oacute; una muestra aleatoria equivalente a 120 ni&ntilde;os: 63 femeninos y 57 masculinos. Se caracterizaron los riesgos relacionados con h&aacute;bitos bucales deformantes (40 %), hipoton&iacute;a muscular (16,70 %), comportamiento de la herencia (32,50 %), malnutrici&oacute;n (20 %), caries dental (56,70 %) y dientes perdidos (25 %). Se calcul&oacute; el Odds ratio relacionado con h&aacute;bitos bucales (7,69), hipoton&iacute;a muscular (12,43) y herencia (3,90), lo que signific&oacute; la probabilidad de riesgo de enfermar en presencia de los factores de riesgo considerados, que permite establecer un sistema de vigilancia epidemiol&oacute;gica al respecto.</p> <p><i>Palabras clave: </i>maloclusi&oacute;n; enfermedades periodontales; caries dental; factores de riesgo</p> <p>Todos los seres vivos est&aacute;n expuestos constantemente a m&uacute;ltiples y diversos riesgos de enfermar y de morir. El hombre, que vive en un ambiente sociocultural artificial, es decir, creado y desarrollado hist&oacute;ricamente por &eacute;l mismo, tiene por razones ecol&oacute;gicas y sociales una diversidad de riesgos y una oportunidad tambi&eacute;n mayor de enfrentarse a ellos. <br> </p> <p>La noci&oacute;n de riesgo epidemiol&oacute;gico es funci&oacute;n de la existencia del ser humano viviendo en un ambiente social en variaci&oacute;n permanente; vale decir, los riesgos que afectan nuestra salud, dependen de la vida en sociedad y, m&aacute;s precisamente, del tipo estructural de la sociedad en que vivimos.<span class="superscript">1,2</span> <br> </p> <p>En vista de las dificultades de aplicaci&oacute;n de modelos de determinaci&oacute;n causal en el abordaje de su objeto de conocimiento, la epidemiolog&iacute;a moderna se estructura en torno de un concepto fundamental: riesgo. La idea de riesgo ha sido crucial para el desarrollo de una epidemiolog&iacute;a de las enfermedades no infecciosas. Riesgo es el correspondiente epidemiol&oacute;gico del concepto matem&aacute;tico de probabilidad,<span class="superscript">3</span> por lo tanto, el concepto epidemiol&oacute;gico de riesgo implica la probabilidad que tiene un individuo (riesgo individual) de desarrollar una enfermedad determinada, un accidente o un cambio en su estado de salud en un per&iacute;odo espec&iacute;fico y en una comunidad dada, a condici&oacute;n de que no enferme o muera de otra causa en este per&iacute;odo.<span class="superscript">4</span> <br> </p> <p>Por definici&oacute;n, se nota la convergencia de 3 dimensiones siempre relacionadas con el concepto de riesgo: ocurrencia de enfermedad, denominador de base poblacional y tiempo. <br> </p> <p>Con prop&oacute;sitos cient&iacute;ficos u operacionales, el concepto de riesgo se torna m&aacute;s &uacute;til al generar nociones correlacionadas como factor de riesgo o grupo de riesgo, por lo que los factores de riesgos (o criterios de riesgos) son aquellas caracter&iacute;sticas y atributos (variables) que se presentan asociados diversamente con la enfermedad o el evento estudiado; ellos no son necesariamente las causas (o la etiolog&iacute;a necesaria), solo sucede que est&aacute;n asociadas con el evento. Como constituyen una probabilidad medible, tienen valor predictivo y pueden usarse con ventajas en prevenci&oacute;n individual como en los grupos y en la comunidad total.<span class="superscript">5,6</span> <br> </p> <p>Concretamente, entendemos por criterio o factor de riesgo a toda caracter&iacute;stica y circunstancias determinada ligada a una persona, a un grupo de personas o a una poblaci&oacute;n, de la cual sabemos que est&aacute; asociada con un riesgo de enfermedad, de la posibilidad de evoluci&oacute;n de un proceso m&oacute;rbido o de la exposici&oacute;n especial a tal proceso.<span class="superscript">7-9</span> <br> </p> <p>A medida que los modelos de riesgo se basan en medidas de incidencia, en rigor, cualquier investigaci&oacute;n para evaluaci&oacute;n de riesgo tiene que establecer la secuencia temporal de la asociaci&oacute;n, esto es, un factor de riesgo debe claramente preceder a la eclosi&oacute;n de la enfermedad. <br> </p> <p>Una distinci&oacute;n te&oacute;rica ha sido propuesta entre factores de riesgo (cuyo efecto puede ser prevenido) y marcadores de riesgo (atributos inevitables, ya producidos, cuyo efecto se halla por lo tanto fuera de control). <br> </p> <p>La identificaci&oacute;n de factores de riesgo es paso obligatorio para la prevenci&oacute;n primaria. Asimismo, el reconocimiento de marcadores de riesgo puede ser extremadamente &uacute;til en la identificaci&oacute;n de grupos bajo-alto riesgo, para la prevenci&oacute;n secundaria, cuando est&aacute;n disponibles los medios de detecci&oacute;n precoz y tratamiento r&aacute;pido.<span class="superscript">3</span> <br> </p> <p>Desde los tiempo de <i>Hip&oacute;crates</i>, fue establecido que es m&aacute;s f&aacute;cil prevenir las enfermedades que curarlas; sin embargo, para su prevenci&oacute;n es imprescindible conocer bien los factores y las condiciones del surgimiento de las enfermedades m&aacute;s difundidas y peligrosas.<span class="superscript">10</span> <br> </p> <p>A medida que la humanidad fue avanzando, un gran n&uacute;mero de hombres continuaron se&ntilde;alando la importancia de la prevenci&oacute;n en Estomatolog&iacute;a, pero no obstante, la Estomatolog&iacute;a no se encontraba representada en la Higiene y Epidemiolog&iacute;a, ya que el mismo profesional, ignorante de la gran potencia de esta en este campo, hab&iacute;a dedicado su profesi&oacute;n a obturar dientes, extraerlos y remplazarlos. Pero en los &uacute;ltimos a&ntilde;os, esta ciencia ha venido experimentando una notable transformaci&oacute;n, al evolucionar de una fase mec&aacute;nica a una cient&iacute;fica, al aplicar una serie de medidas preventivas, que persiguen por finalidad la conservaci&oacute;n anat&oacute;mica y fisiol&oacute;gica de los tejidos, y como consecuencia, una mejor salud bucodental y una mejor salud del organismo en general.<span class="superscript">11-13</span> <br> </p> <p>Todo esto es l&oacute;gico que se produzca en la era actual, la cual podr&iacute;amos llamarla la era de prevenci&oacute;n, pues vemos que el individuo se moviliza constantemente, movilizaci&oacute;n esta que parece partir de las palabras de <i>Toynbee</i> en su estudio de la historia, cuando manifest&oacute; que &quot;una naci&oacute;n enferma no puede sobrevivir&quot;.<span class="superscript">14</span> La teor&iacute;a de los factores de riesgo es uno de los destacados logros de la medicina contempor&aacute;nea, ya que permite controlar aquellos elementos o procesos que incidiendo negativamente obstaculizan el ulterior fortalecimiento de la salud de la poblaci&oacute;n. Esta teor&iacute;a, parte de que la etapa contempor&aacute;nea de la civilizaci&oacute;n humana de tr&aacute;nsito del capitalismo al socialismo, se caracteriza tambi&eacute;n por el progreso cient&iacute;fico-t&eacute;cnico, que conjuntamente con acciones favorables para la salud, se hacen acompa&ntilde;ar de &quot;impuestos&quot; que se manifiestan negativamente sobre estas. No por casualidad esta acci&oacute;n negativa es denominada algunas veces &quot;el pago&quot; por la adaptaci&oacute;n a nuevas condiciones cambiantes de la vida.<span class="superscript">15</span> <br> </p> <p>Los factores de riesgo no act&uacute;an aisladamente, sino en conjunto, interrelacionadamente, lo que con frecuencia fortalece en gran medida su nocivo efecto para la salud. Se tienen c&aacute;lculos de la acci&oacute;n combinada de los factores de riesgo que muestran que su acci&oacute;n conjunta siempre es mayor que la simple suma aritm&eacute;tica de los riesgos relativos, por lo que la evaluaci&oacute;n de un factor de riesgo ser&aacute; cient&iacute;ficamente m&aacute;s aceptable si se consideran no solo sus efectos directos y aislados, sino tambi&eacute;n sus efectos conjuntos con otras variables de inter&eacute;s.<span class="superscript">16,17</span> <br> </p> <p>Es importante subrayar que la inespecificidad de los factores se&ntilde;alados para el surgimiento de enfermedades determinadas o clase de enfermedades, requiere de la utilizaci&oacute;n de la concepci&oacute;n de los factores de riesgo y su an&aacute;lisis desde posiciones socio-higi&eacute;nicas integrales, y no desde los puntos de vista de las diferentes disciplinas cl&iacute;nicas (Neumolog&iacute;a, Cardiolog&iacute;a, Oncolog&iacute;a, etc.).<span class="superscript">18,19</span> <br> </p> <p>El empleo de diversos &iacute;ndices ha permitido correlacionar en numerosos grupos de poblaci&oacute;n, las principales enfermedades bucales: caries, periodontopat&iacute;as y maloclusiones, con diversos factores de riesgo, indudablemente relacionados entre s&iacute;. <br> </p> <p>Son innumerables los investigadores que coinciden y relacionan los microorganismos de la placa y la influencia de los mismos desencadenante de caries y periodontopat&iacute;as.<span class="superscript">20,21</span> <br> </p> <p>Las maloclusiones, junto con la caries y la enfermedad periodontal, act&uacute;an como factores causales rec&iacute;procos, ya que la p&eacute;rdida de los dientes por caries conlleva al acortamiento de la longitud del arco, motivando irregularidades en las posiciones dentarias, acompa&ntilde;adas de empaquetamiento de alimentos y fuerzas anormales sobre estos, lo que predispone a caries y lesiones al periodonto. <br> </p> <p>La colocaci&oacute;n irregular de los dientes en el arco dentario puede desencadenar caries y enfermedad periodontal, ya que facilita el ac&uacute;mulo de residuos de alimentos y de placa bacteriana sobre los mismos, lo cual hace menos efectiva la higiene bucal. <br> </p> <p>Aunque no exista uniformidad en los m&eacute;todos evaluativos epidemiol&oacute;gicos de los problemas oclusales, debido a que no hay una valoraci&oacute;n estad&iacute;stica &uacute;nica que pueda ser empleada por todos los investigadores, la mayor&iacute;a ha coincidido en que del 54 al 78,8 % de los ni&ntilde;os necesitan tratamiento ortod&oacute;ntico en las edades comprendidas entre 12 y 18 a&ntilde;os. <br> </p> <p>Ciertos tipos de maloclusiones producen profundos impactos psicol&oacute;gicos en el ni&ntilde;o; en algunos afectan el habla y su manera de comportarse socialmente, ya que su aspecto f&iacute;sico los hace manifestarse t&iacute;midos, retra&iacute;dos, apartados o hasta agresivos. <br> </p> <p>Algunos autores clasifican estas maloclusiones como deformidades dentofaciales incapacitantes o estados que interfieren con el bienestar general del ni&ntilde;o, ya que pueden afectar su est&eacute;tica dentofacial, las funciones masticatorias o respiratorias, el habla o el equilibrio f&iacute;sico o psicol&oacute;gico. <br> </p> <p>Para la determinaci&oacute;n de las necesidades de tratamiento, es recomendado el uso del &iacute;ndice de evaluaci&oacute;n de las anomal&iacute;as dentofaciales incapacitantes, ya que ser&iacute;a insuficiente el personal t&eacute;cnico con que se cuenta, si se tuviera que dar atenci&oacute;n a todos aquellos ni&ntilde;os que presentaran maloclusiones ligeras.<span class="superscript">22</span> <br> </p> <p>Los factores de riesgo pueden ser tanto indicadores de riesgo como causa de da&ntilde;o a la salud. <br> </p> <p>Para medir el riesgo es necesario decidir cu&aacute;l es el resultado adverso que interesa, hay que hacer una descripci&oacute;n completa de su epidemiolog&iacute;a y de todos los factores de riesgo relacionados.<span class="superscript">23</span> <br> </p> <p>Entonces, cabr&iacute;a preguntarnos: &iquest;cu&aacute;les son los factores de riesgo que en nuestro medio influyen en la aparici&oacute;n de las principales enfermedades bucales en ni&ntilde;os? <br> </p> <p>Los factores de riesgo pueden estar presentes en todas las etapas de la vida, pero en nuestro trabajo el objetivo son las edades entre 9 y 15 a&ntilde;os, porque nos preocupan las condiciones biol&oacute;gicas, psicol&oacute;gicas y sociales que se asocian con un incremento de la susceptibilidad para desarrollar determinadas enfermedades o desviaciones de la salud en esta etapa. <br> </p> <p>Si no se conoce c&oacute;mo se comportan los factores de riesgo de estas enfermedades, no se podr&aacute;n realizar programas preventivos efectivos que nos permitan actuar de forma precisa en la prevenci&oacute;n. <br> </p> <p>Los resultados de las investigaciones realizadas demuestran que lesiones ocurridas en la ni&ntilde;ez y adolescencia tienen car&aacute;cter reversible durante los primeros a&ntilde;os de la edad adulta, mientras que presentan forma irreversible en la edad madura. <br> </p> <p>La atenci&oacute;n estomatol&oacute;gica integral constituye un reto cient&iacute;fico moral, pues el estomat&oacute;logo debe ampliar sus conocimientos sobre atenci&oacute;n al medio y al hombre. <br> </p> <p>A&uacute;n quedan muchos aspectos por definir en relaci&oacute;n con la atenci&oacute;n estomatol&oacute;gica al medio social y natural donde residen las personas y las familias; ejemplo de ello ser&iacute;a el conocimiento de la historia social de las enfermedades bucales, los riesgos, y otros factores determinantes sociales, para lo cual es necesario ampliar conocimientos en psicolog&iacute;a, sociolog&iacute;a, epidemiolog&iacute;a, etc. Tambi&eacute;n deber&aacute;n ampliarse los conocimientos relacionados con los factores determinantes biol&oacute;gicos y el desempe&ntilde;o profesional para enfrentarlos, cuya base ser&iacute;a el dominio de la atenci&oacute;n primaria en las especialidades estomatol&oacute;gicas: EGI, Periodoncia, Ortodoncia, Cirug&iacute;a y Pr&oacute;tesis.<span class="superscript">24</span> <br> </p> <p>Entonces, educar para promover y proteger la salud, conociendo los factores de riesgo de las principales enfermedades bucales, ser&aacute; la meta a alcanzar mediante un nuevo modelo de atenci&oacute;n estomatol&oacute;gica que responder&iacute;a al concepto de la Estomatolog&iacute;a General Integral (EGI), que coloca al hombre como un ser biosocial sobre el que influyen diferentes factores de riesgo, como atributos que pueden actuar negativamente en la aparici&oacute;n y desarrollo de la enfermedad; es por eso que con nuestra investigaci&oacute;n pensamos contribuir al desarrollo de este modelo, estudiando y analizando los principales factores de riesgo asociados con las caries dentales, periodontopat&iacute;as y maloclusiones. <br> </p><h3>Objetivos <br> </h3><b>General:</b> <br> <p>Caracterizar los principales factores de riesgo de la maloclusi&oacute;n. <br> </p><b>Espec&iacute;fico:</b> <br> <p>Determinar el grado de asociaci&oacute;n de los principales factores de riesgo relacionados con la maloclusi&oacute;n. <br> </p><h4>M&eacute;todos</h4> <p>Se realiz&oacute; un estudio anal&iacute;tico del tipo de casos y controles en el municipio de Col&oacute;n en la provincia de Matanzas, en el per&iacute;odo comprendido de los cursos acad&eacute;micos a&ntilde;os 2000-2002. <br> </p> <p>El universo del estudio estuvo constituido por todos los ni&ntilde;os de las siguientes edades: 9, 12 y 15 a&ntilde;os, en total 2 995 ni&ntilde;os; 1 079 de 9 a&ntilde;os, 977 de 12 y 939 de 15 a&ntilde;os, de los cuales se tom&oacute; una muestra aleatoria. Se consider&oacute; la prevalencia de padecer al menos una de las enfermedades seleccionadas como del 50 % (p = 0,50). El dise&ntilde;o muestral empleado incluy&oacute; 2 etapas de selecci&oacute;n: en la primera se eligieron 3 escuelas primarias del total de 9 que tiene el municipio y 2 escuelas secundarias de las 5 existentes en el territorio. Las escuelas seleccionadas fueron: <br> Primarias: &quot;Frank Pa&iacute;s&quot; &quot;Eduardo Ren&eacute; Chiv&aacute;s&quot;, &quot;Inti Peredo&quot;. <br> Secundarias: &quot;Roberto Coco Peredo&quot;, &quot;Julio Reyes Cairo&quot;. <br> </p> <p>Mediante la siguiente f&oacute;rmula se obtuvo el tama&ntilde;o muestral necesario, 60 casos por cada enfermedad, y se decidi&oacute; tomar 20 alumnos de cada grupo de edad que presentaran cualquiera de las patolog&iacute;as en estudio. <br> </p> <p align="center"><img src="/img/revistas/est/v41n1/for01104.jpg" width="292" height="85"></p> <p></p> <p>P: prevalencia de enfermedades seleccionadas (0,50). <br> Q: 1 - P. <br> Z1- : percentil de la distribuci&oacute;n normal. <br> Eo2: cuadrado del m&aacute;ximo error admisible. <br> n: tama&ntilde;o de muestra. <br> N: tama&ntilde;o poblacional. <br> </p> <p><b>Selecci&oacute;n de los casos:</b> se consider&oacute; como caso a los pacientes portadores de la enfermedad en estudio, que se define como: <br> </p> <p>Maloclusi&oacute;n: desviaci&oacute;n del patr&oacute;n deseado en la dentici&oacute;n, macizo facial, la musculatura buco-facial, los maxilares y las articulaciones temporo-mandibulares. <br> </p> <p><b>Selecci&oacute;n de los controles:</b> se tom&oacute; un control por cada caso, que fueron los ni&ntilde;os sanos (los cuales despu&eacute;s de realiz&aacute;rsele el examen cl&iacute;nico no presentaron signos ni s&iacute;ntomas de la enfermedad de estudio). <br> </p> <p><b>Met&oacute;dica:</b> <br> Para dar respuesta a los objetivos espec&iacute;ficos se estudiaron las variables que se muestran en el anexo. <br> </p> <p><b>&Eacute;tica:</b> <br> La participaci&oacute;n de los ni&ntilde;os en la investigaci&oacute;n dependi&oacute; del consentimiento informado dado por sus padres. <br> </p> <p><b>T&eacute;cnicas de recogida, procesamiento y an&aacute;lisis de la informaci&oacute;n:</b> <br> Se confeccion&oacute; una base de datos en Excel con los datos obtenidos de las encuestas. Se emple&oacute; el paquete estad&iacute;stico SPSS para el an&aacute;lisis. <br> </p> <p><b>An&aacute;lisis estad&iacute;stico:</b> <br> Para identificar la posible asociaci&oacute;n entre los factores de riesgo y las enfermedades en estudio se emplearon tablas de contingencia (2x2) por tratarse de variables cualitativas dicot&oacute;micas en su mayor&iacute;a y se aplic&oacute; la prueba de Chi cuadrado, con un nivel de confiabilidad del 95 %. Para las variables cuya asociaci&oacute;n con las enfermedades result&oacute; ser significativamente diferente de cero, se obtuvo el ODDS ratio, con el prop&oacute;sito de cuantificar el grado de la asociaci&oacute;n y poder obtener la probabilidad de riesgo de enfermar en presencia de los factores de riesgo considerados. <br> </p><h4>Resultados <br> </h4> <p>Se seleccionaron 120 ni&ntilde;os, 63 del sexo femenino y 57 del sexo masculino, los cuales se distribuyeron en 60 ni&ntilde;os sanos como controles y 60 ni&ntilde;os afectados como casos (tabla 1).</p> <p align="center"><b>Tabla 1.</b> Distribuci&oacute;n por sexo seg&uacute;n grupos <br> </p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td rowspan="3">Grupo</td><td colspan="6"> <div align="left">&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;Sexo</div></td></tr> <tr> <td colspan="2"> <div align="center">Femenino</div> <div align="center"></div></td><td colspan="2"> <div align="center">Masculino</div> <div align="center"></div></td><td colspan="2"> <div align="center">Total</div> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td> <div align="center">No. </div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No. </div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">&nbsp;%</div></td></tr> <tr> <td>Control </td><td> <div align="center">35 </div></td><td> <div align="center">58,30</div></td><td> <div align="center">25 </div></td><td> <div align="center">41,70</div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Caso</td><td> <div align="center">28 </div></td><td> <div align="center">46,70</div></td><td> <div align="center">32 </div></td><td> <div align="center">53,30</div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Total</td><td> <div align="center">63 </div></td><td> <div align="center">52,50</div></td><td> <div align="center">57 </div></td><td> <div align="center">47,50</div></td><td> <div align="center">120 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> </table> <p>&nbsp;</p> <p>En la tabla 2 se muestra el comportamiento de los h&aacute;bitos bucales deformantes. Se observa que el 40, 80% presenta el riesgo, y corresponde el 63,30 % a los casos.</p> <p align="center"><b>Tabla 2.</b> Comportamiento de los h&aacute;bitos deformantes seg&uacute;n grupos <br> </p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td rowspan="3">Grupo</td><td colspan="4"> <div align="center"></div> <div align="center">H&aacute;bitos deformantes</div> <div align="center"></div> <div align="center"></div></td><td colspan="2"> <div align="center">Total</div></td></tr> <tr> <td colspan="2"> <div align="center">No</div></td><td colspan="2"> <div align="center">S&iacute; </div></td><td width="15%"> <div align="center"></div></td><td width="16%"> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td width="15%"> <div align="center">No. </div></td><td width="11%"> <div align="center">% </div></td><td width="13%"> <div align="center">No.</div></td><td width="11%"> <div align="center">% </div></td><td width="15%"> <div align="center">No. </div></td><td width="16%"> <div align="center">&nbsp;%</div></td></tr> <tr> <td width="19%">Control</td><td width="15%"> <div align="center">49 </div></td><td width="11%"> <div align="center">81,70</div></td><td width="13%"> <div align="center">11 </div></td><td width="11%"> <div align="center">18,30</div></td><td width="15%"> <div align="center">60 </div></td><td width="16%"> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td width="19%">Caso </td><td width="15%"> <div align="center">22</div></td><td width="11%"> <div align="center">36,70</div></td><td width="13%"> <div align="center">38</div></td><td width="11%"> <div align="center">63,30</div></td><td width="15%"> <div align="center">60 </div></td><td width="16%"> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td width="19%">Total </td><td width="15%"> <div align="center">71</div></td><td width="11%"> <div align="center">59,20 </div></td><td width="13%"> <div align="center">49 </div></td><td width="11%"> <div align="center">40,80</div></td><td width="15%"> <div align="center">120</div></td><td width="16%"> <div align="center">100</div></td></tr> </table> <p align="center">p = 0,000. <br> </p> <p align="left">En la tabla 3 se refleja el comportamiento de la hipoton&iacute;a muscular. Se aprecia que el 16,70 % presenta el riesgo. Corresponde el 30 % a los casos.</p> <p align="center"><b>Tabla 3.</b> Comportamiento de la hipoton&iacute;a muscular seg&uacute;n grupos <br> </p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td rowspan="3">Grupo</td><td colspan="4"> <div align="center">Hipoton&iacute;a muscular</div></td><td> <div align="center">Total</div></td><td> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td colspan="2"> <div align="center">No</div></td><td colspan="2"> <div align="center">S&iacute; </div></td><td colspan="2"> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No. </div></td><td> <div align="center">&nbsp;%</div></td></tr> <tr> <td>Control </td><td> <div align="center">58 </div></td><td> <div align="center">96,70 </div></td><td> <div align="center">2 </div></td><td> <div align="center">3,30</div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Caso</td><td> <div align="center">42 </div></td><td> <div align="center">70,00</div></td><td> <div align="center">18 </div></td><td> <div align="center">30,00 </div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Total </td><td> <div align="center">100</div></td><td> <div align="center">83,30</div></td><td> <div align="center">20 </div></td><td> <div align="center">16,70</div></td><td> <div align="center">120</div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> </table> <p align="center">p = 0,000.</p> <p align="left"> En la tabla 4 se presenta el comportamiento de la herencia. El 32,50 % presenta el riesgo, y el 46,70 % corresponde a los casos. <br> </p> <p align="center"><b>Tabla 4.</b> Comportamiento de la herencia seg&uacute;n grupos</p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td rowspan="3">Grupo</td><td colspan="4"> <div align="center">Herencia</div></td><td colspan="2"> <div align="center">Total</div></td></tr> <tr> <td colspan="2"> <div align="center">No </div></td><td colspan="2"> <div align="center">S&iacute; </div></td><td> <div align="center"></div></td><td> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">&nbsp;%</div></td></tr> <tr> <td>Control </td><td> <div align="center">49 </div></td><td> <div align="center">81,70</div></td><td> <div align="center">11</div></td><td> <div align="center">18,30</div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Caso</td><td> <div align="center">32</div></td><td> <div align="center">53,30</div></td><td> <div align="center">28 </div></td><td> <div align="center">46,70</div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Total </td><td> <div align="center">81</div></td><td> <div align="center">67,50</div></td><td> <div align="center">39 </div></td><td> <div align="center">32,50</div></td><td> <div align="center">120 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> </table> <p align="center">p = 0,001.</p> <p align="left">En la tabla 5 se observa el comportamiento de la malnutrici&oacute;n. El 20 % presenta el riesgo, y corresponde el 23,30 % a los casos.</p> <p align="center"><b>Tabla 5.</b> Comportamiento de la malnutrici&oacute;n seg&uacute;n grupos <br> </p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td rowspan="3">Grupo</td><td colspan="4"> <div align="center">Malnutrici&oacute;n</div></td><td colspan="2"> <div align="center">Total</div></td></tr> <tr> <td colspan="2"> <div align="center">No </div></td><td colspan="2"> <div align="center">S&iacute; </div></td><td> <div align="center"></div></td><td> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No. </div></td><td> <div align="center">&nbsp;%</div></td></tr> <tr> <td>Control</td><td> <div align="center">50</div></td><td> <div align="center">83,30</div></td><td> <div align="center">10 </div></td><td> <div align="center">16,70</div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Caso</td><td> <div align="center">46 </div></td><td> <div align="center">76,70 </div></td><td> <div align="center">14 </div></td><td> <div align="center">23,30 </div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Total</td><td> <div align="center">96</div></td><td> <div align="center">80,00</div></td><td> <div align="center">24 </div></td><td> <div align="center">20,00</div></td><td> <div align="center">120 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> </table> <p align="center">p = 0,247.</p> <p align="left">El comportamiento de la caries dental se observa en la tabla 6. El 56,70 % presenta el riesgo; el 51,70 % correspondi&oacute; a los casos. <br> </p> <p align="center"><b>Tabla 6.</b> Comportamiento de la caries dental seg&uacute;n grupos </p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td rowspan="3">Grupo</td><td colspan="4"> <div align="center">Caries</div></td><td colspan="2"> <div align="center">Total</div></td></tr> <tr> <td colspan="2"> <div align="center">No</div></td><td colspan="2"> <div align="center">S&iacute; </div></td><td> <div align="center"></div></td><td> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No. </div></td><td> <div align="center">&nbsp;%</div></td></tr> <tr> <td>Control</td><td> <div align="center">23 </div></td><td> <div align="center">38,30</div></td><td> <div align="center">37 </div></td><td> <div align="center">61,70 </div></td><td> <div align="center">60</div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Caso</td><td> <div align="center">29</div></td><td> <div align="center">48,30</div></td><td> <div align="center">31</div></td><td> <div align="center">51,70 </div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Total</td><td> <div align="center">52</div></td><td> <div align="center">43,30</div></td><td> <div align="center">68 </div></td><td> <div align="center">56,70</div></td><td> <div align="center">120 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> </table> <p align="center">p = 0,179.</p> <p align="left">En la tabla 7, que muestra el comportamiento de los dientes perdidos, se observa que el 25 % presenta el riesgo, y corresponde el 30 % a los casos. <br> </p> <p align="center"><b>Tabla 7.</b> Comportamiento de los dientes perdidos seg&uacute;n grupos </p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td rowspan="3">Grupo </td><td colspan="4"> <div align="center">Dientes perdidos</div></td><td colspan="2"> <div align="center">Total</div></td></tr> <tr> <td colspan="2"> <div align="center">No </div></td><td colspan="2"> <div align="center">S&iacute; </div></td><td> <div align="center"></div></td><td> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No. </div></td><td> <div align="center">% </div></td><td> <div align="center">No. </div></td><td> <div align="center">&nbsp;%</div></td></tr> <tr> <td>Control</td><td> <div align="center">48</div></td><td> <div align="center">80,00</div></td><td> <div align="center">12</div></td><td> <div align="center">20,00</div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Caso</td><td> <div align="center">42</div></td><td> <div align="center">70,00</div></td><td> <div align="center">18 </div></td><td> <div align="center">30,00</div></td><td> <div align="center">60 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> <tr> <td>Total </td><td> <div align="center">90 </div></td><td> <div align="center">75,00</div></td><td> <div align="center">30 </div></td><td> <div align="center">25,00</div></td><td> <div align="center">120 </div></td><td> <div align="center">100</div></td></tr> </table> <p align="center">p = 0,146.</p><h4 align="left">Discusi&oacute;n <br> </h4> <p align="left">Muchos autores han discutido los factores etiol&oacute;gicos de las maloclusiones exponiendo el aspecto multifactorial de estos, ya que para un desv&iacute;o de la anormalidad participan conjuntamente diferentes causas;<span class="superscript">25 </span>entre ellas, y de suma importancia, se encuentran los h&aacute;bitos bucales deformantes.<span class="superscript">26</span> <br> </p> <p align="left">En el an&aacute;lisis de nuestros resultados expuestos en la tabla 2 se puede observar claramente la veracidad de esas afirmaciones, donde el 63,30 % de los pacientes en el grupo de estudio presentaron h&aacute;bitos deformantes, comparado con solo el 18,30 % en el grupo de controles. Entre ambos grupos existi&oacute; una correlaci&oacute;n altamente significativa (p = 0,000). <br> </p> <p align="left">La hipoton&iacute;a muscular, principalmente del orbicular de los labios, como lo demuestran diferentes estudios, es considerado un factor de riesgo significativo en el desarrollo de las maloclusiones,<span class="superscript">27 </span>resultados estos que pueden ser comparados con los alcanzados en nuestro trabajo (tabla 3), donde el 30,00 % de los ni&ntilde;os que ten&iacute;an maloclusiones presentaron esta caracter&iacute;stica, comparado con solo el 3,30 % de los ni&ntilde;os que no ten&iacute;an esta afectaci&oacute;n, hecho que demuestra la existencia de una correlaci&oacute;n positiva entre ambos grupos (p = 0,000). <br> </p> <p align="left">Factores hereditarios y cong&eacute;nitos han sido relacionados con la mala ubicaci&oacute;n de los dientes en el arco, y muchos padres se muestran preocupados con el origen de anormalidades dentarias diagnosticadas en sus descendientes. Algunos estudios muestran la importancia de conocer los factores de riesgo asociados con las maloclusiones, entre ellos la herencia, demostrando el efecto de esta sobre la oclusi&oacute;n.<span class="superscript">25</span> En nuestra investigaci&oacute;n, como se muestra en la tabla 4, pudimos conocer su influencia en el desarrollo de las maloclusiones. Se present&oacute; una relaci&oacute;n estad&iacute;sticamente significativa entre el grupo de estudio y control (p = 0,001) donde el 46,70 % de los pacientes con esta anomal&iacute;a refirieron presentar en su familia similares caracter&iacute;sticas. En el grupo control solo el 18,30 % de los encuestados conoc&iacute;an de alguien en su familia con alg&uacute;n trastorno de este tipo. <br> </p> <p align="left">La malnutrici&oacute;n ha sido relacionada con la prevalencia de las maloclusiones; existen estudios que as&iacute; lo demuestran.<span class="superscript">28,29</span> Si observamos la tabla 5, podemos ver que un mayor porcentaje (23,30 %) de los pacientes del grupo de estudio presentaron malnutrici&oacute;n en relaci&oacute;n con el 16,70 % del grupo control, sin embargo, en nuestro trabajo no se obtuvo una relaci&oacute;n estad&iacute;sticamente significativa entre ambos grupos (p = 0,247). <br> </p> <p align="left">Algunos investigadores han planteado que la p&eacute;rdida de dientes y la caries dental conlleva al acortamiento de la longitud del arco y motiva irregularidades en las posiciones dentarias. Si se analizan estas variables de nuestra investigaci&oacute;n, se puede observar que en cuanto a la caries dental (tabla 6) el 61,70 % de los controles estaban enfermos y solo el 51,70 % de los casos la pose&iacute;an, sin existir una correlaci&oacute;n positiva entre ambos grupos (p = 0,179), y que a pesar de que el 30,00 % de los pacientes del grupo de estudio presentaron dientes perdidos (tabla 7) en relaci&oacute;n con el 20,00 % de los del grupo control, tampoco estad&iacute;sticamente fue significativo. Se debe tener en cuenta a la edad en que se producen las p&eacute;rdidas dentarias o la caries dental, lo que puede tener una relaci&oacute;n directa o no con la producci&oacute;n de maloclusiones. <br> </p> <p align="left">Se puede concluir planteando que las maloclusiones han sido relacionadas con diversos factores de riesgo. En el presente estudio e muestra una relaci&oacute;n estad&iacute;sticamente significativa con los h&aacute;bitos deformantes, la hipoton&iacute;a muscular, la herencia y otros, lo cual demuestra el aspecto multifactorial estos factores en la causalidad de estas. <br> <br> </p> <p align="center">Anexo. Maloclusiones <br> </p><table width="97%" border="1" align="center"> <tr> <td>Variable </td><td>Tipo </td><td>Escala de calificaci&oacute;n </td><td>Descripci&oacute;n</td></tr> <tr> <td>1. H&aacute;bitos deformantes</td><td>Cualitativa nominal dicot&oacute;mica </td><td>S&iacute; <br> No</td><td>Seg&uacute;n presencia de succi&oacute;n digital, respiraci&oacute;n bucal, lengua prot&aacute;ctil, uso de biber&oacute;n, tete, queilofagia</td></tr> <tr> <td>2. Hipoton&iacute;a muscular</td><td>Cualitativa nominal dicot&oacute;mica </td><td>S&iacute; <br> No</td><td>Si present&oacute; o no hipoton&iacute;a muscular seg&uacute;n observaci&oacute;n cl&iacute;nica </td></tr> <tr> <td>3. Herencia </td><td>Cualitativa nominal dicot&oacute;mica</td><td>S&iacute; <br> No</td><td>Seg&uacute;n anamnesis del paciente</td></tr> <tr> <td>4. Malnutrici&oacute;n</td><td>Cualitativa nominal dicot&oacute;mica </td><td>S&iacute; <br> No</td><td>Se anot&oacute; talla y peso y se ubic&oacute; en el percentil correspondiente seg&uacute;n la tabla de valores cubanos de talla y peso</td></tr> <tr> <td>5. Caries dentales</td><td>Cualitativa nominal dicot&oacute;mica</td><td>S&iacute; <br> No</td><td>Seg&uacute;n examen cl&iacute;nico</td></tr> <tr> <td>6. Dientes perdidos</td><td>Cualitativa nominal dicot&oacute;mica</td><td>S&iacute; <br> No</td><td>Seg&uacute;n examen cl&iacute;nico</td></tr> </table> <p align="left">&nbsp;</p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td>Variables </td><td><i>Odds ratio</i></td><td>Intervalo de confianza </td><td>Probabilidad</td></tr> <tr> <td>H&aacute;bitos deformantes</td><td>7,69 </td><td>(3,09; 19,55) </td><td>0,000</td></tr> <tr> <td>Hipoton&iacute;a muscular</td><td>12,43</td><td>(2,56; 82,15)</td><td>0,000</td></tr> <tr> <td>Herencia</td><td>3,90</td><td>(1,50; 9,73)</td><td>0,000 </td></tr> <tr> <td>Malnutrici&oacute;n</td><td>1,52</td><td>(0,56; 4,14)</td><td>0,36</td></tr> <tr> <td>Caries dentales</td><td>0,66</td><td>(0,30; 1,46)</td><td>0,26</td></tr> <tr> <td>Dientes perdidos </td><td>1,71</td><td>(0,69; 4,32)</td><td>0,20</td></tr> </table> <p align="left">Se utilizaron adem&aacute;s las variables demogr&aacute;ficas: <br> </p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td>Variable </td><td>Tipo </td><td>Escala de calificaci&oacute;n</td><td>Descripci&oacute;n</td></tr> <tr> <td>1. Edad </td><td>Cuantitativa continua</td><td>9, 12,15</td><td>Seg&uacute;n a&ntilde;os cumplidos</td></tr> <tr> <td>2. Sexo </td><td>Cualitativa nominal dicot&oacute;mica</td><td>Masculino <br> Femenino </td><td>Seg&uacute;n g&eacute;nero a que pertenecen</td></tr> </table><h4>Summary</h4> <p>An analytical case-control study was performed in Colon municipality, Matanzas province, Cuba, from 2000 to 2002. The universe of study was made up of 939 children aged 9, 12 and 15 years, from whom 120 were taken as equivalent random sample (63 females and 57 males). The risk characterization was based on deforming oral habits (40%), muscular hypotonia (16,70%, heredity performance (32,5%), malnutrition (20%), dental caries (56,70%) and lost teeth (25%). The estimated odds ratio was more related to oral habits (7,69%) muscular hypotonia (12,43%) and heredity (3,90%), which means that there exists the probability of getting sick in the face of the considered risk factors. This allows setting up an epidemiological surveillance system on this issue. </p> <p><i>Key words</i>: Malocclusin; Periodontal diseases; Dental caries; Risk factors. <br> </p><h4>Referencias bibliogr&aacute;ficas <br> </h4><ol> <li> San Mart&iacute;n H, Mart&iacute;n AC, Carrasco JL. Epidemiolog&iacute;a. Investigaci&oacute;n pr&aacute;ctica. Madrid: Edit. D&iacute;az Santos; 1990. <br> </li> <li> Slade GO, Caplen DJ. Methodological issuas in longitudinal epidemiologic dental caries. Com Dent Oral Epidemiol 1999;27(4):236-48. <br> </li> <li> Almeida Filho N. Epidemiolog&iacute;a sin n&uacute;meros. Washington: OPS; 1992. Serie Paltex. <br> </li> <li> Erickson PR. Estimation of the caries - realted risk associated with formula. Pediatr Dent 1998 nov-dec; 20(7):395-403. <br> </li> <li> Narey RD, Alderegu&iacute;a HJ. Medicina social y salud p&uacute;blica en Cuba. La Habana: Edit. Pueblo y Educaci&oacute;n; 1990. <br> </li> <li> Rodr&iacute;guez Calzadilla A. 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Ave. Salvador Allende y calle G, municipio Plaza, Ciudad de La Habana, Cuba.</p> <p></p> <p> <br> <span class="superscript"><a href="#autor">1</a></span><a href="#autor">&nbsp;Especialista de I Grado en Estomatolog&iacute;a General Integral. <br> <span class="superscript">2</span> Especialista de II Grado en Administraci&oacute;n de Salud. Profesor Consultante de la Facultad &nbsp;&nbsp;&nbsp;de Estomatolog&iacute;a. Magister en Salud P&uacute;blica. <br> <span class="superscript">3</span> Especialista de I Grado en Bioestad&iacute;stica. Especialista de I Grado en Administraci&oacute;n de &nbsp;&nbsp;&nbsp;Salud.Profesora Adjunta de la eEscuela de Salud P&uacute;blica.</a><a name="cargo"></a></p>

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